Si la preparo en ENSALADA no tienen problemas, y los paquetitos de hoy se los comen hasta rebañar el plato, pero el olorcito no tengo forma de disimularlo, por mucho truco que circule por ahí y me hayan aconsejado.
Y después dicen que los hijos hacen lo que ven en casa, ¡ ¡ ¡ JÁ ! ! !
En muchos aspectos de la vida no te lo niego, pero en el tema verdulero ya te digo que no. Porque yo que más bien soy un grillo, si por ellos fuera basarían su alimentación en: pizzas, perritos, hamburguesas, mucha carne y cuatro pamplinas más. Eso si, todo casero, porque dicen que no les gusta ya las de la calle tanto . . . . . menudo consuelo.
Y como soy bastante
Y ahora vamos al lío.
** Si no utilizas soja, quedan igualmente ricos, con carne molida**
- Empezaremos poniendo la soja en remojo durante unos minutos para que se hidrate.
- Separaremos las hojas de col, una a una y con paciencia, cuesta un poco de trabajo al ser una verdura apretada.
- En agua hirviendo, sumergimos las hojas aproximadamente diez minutos. Después pasamos a un colador para que elimine el agua.
- Partimos la cebolla y el pimiento en trozos pequeños, para hacer un refrito.
- Cuando la soja esté hidratada, ponemos en una sartén, cuatro cucharadas de aceite y refreímos los tres ingredientes a fuego medio bajo y tapados. En el momento que la cebolla, esté blanda, estará listo. Salpimentamos.
- Agregamos una cucharada de harina y dejamos tostar un poco para que quitar el sabor a cruda.
- A continuación añadimos un chorretón de leche o caldo de verduras. Sólo queremos que se compacte el conjunto para rellenar más facilmente los paquetes.
- Vamos cogiendo las hojas de col y cortando la parte del nervio central. Estos nervios, los reservamos, aquí no se tira nada { Al día siguiente los refreí con un ajito y un poco de pimentón y ya tuve un acompañamiento estupendo}
- Empezamos a rellenar las hojas. Le damos la vuelta, y dejamos la parte cortada arriba.
- Añadimos el relleno, enrollamos un poco, cerramos la parte derecha, parte izquierda y ya tenemos formado nuestro primer paquete.
- Si creemos que alguno se abrirá durante la cocción, ponemos un palillo.
- Si alguna hoja se nos rompe, utilizaremos un trozo de otra hoja, hemos cocido dos más como repuesto.
- En un caldero ancho, ponemos cuatro cucharadas de aceite de oliva y volcamos la lata de tomate y el agua, dejamos que empiece a hervir.
- Vamos acomodando nuestros paquetitos.
- Tapamos, seleccionamos fuego medio y dejamos cocer veinte minutos, damos la vuelta a los paquetitos, dejamos diez minutos más y listos.
- Si te gusta la salsa más espesa, puedes sacar los paquetes ya cocinados y dejar la salsa hasta que esté a tu gusto. Vuelves a dejar los paquetes, en ella, y a comer.
Dos paquetes por comensal, es una ración estupenda. Estas cantidades están pensadas para cuatro personas. Pero siempre hay alguien que repite.
Por cierto, si tienes algún vegetariano al que quieras sorprender, te aseguro que este plato lo consigue con creces.
Y eso es todo amigos, hasta la semana que viene, sean felices o al menos, inténtelo