Y hace tiempo vengo fijándome en las Cocas. Como soy ajena a esta preparación tan mediterránea, la he estudiado, amasado y disfrutado como una Novel en potencia.
Hace unos días le vi ÉSTA a Alejandra en su blog Una Fiera en mi cocina y para entender el concepto de la Coca, le hice alguna consulta. Y tras su amable, eficiente y rápida respuesta, las conclusiones fueron las siguientes: las Cocas se comen frías, no llevan extendido tomate en la base de la masa, no tiene por qué llevar queso, se deja la masa más bien gordita al extenderla, y es más esponjosa que crujiente.
No dejéis de pasaros por su blog, merece la pena, y mucho ¿ el motivo ? que está todo muy rico y ella también es para comérsela.
Con estas indicaciones, y mis ganas de sacar harinas y rodillo, aquí está la primera Coca salada de mi horno, una delicia en toda regla. Por supuesto no será la última y ahora que empieza el buen tiempo, me parece una comida estupenda acompañada de una buena ensalada.
Creo que van a ser las protagonistas de muchas comidas en casa.
Evidentemente he hecho cambios, sabemos que nuestra vena "cocinera-retocona", es difícil mantenerla guardada y quería probar tres harinas diferentes en la misma masa, pero he respetado la cantidad de los demás ingredientes, eso sí, aplicando mi querida regla de tres, que mi masa era más pequeña.
Vamos con la receta, veréis que fácil.
NECESITAREMOS:
* Tanto los líquidos como los sólidos están indicados en gramos.
CÓMO LA HAREMOS:
- Poner todos los ingredientes en la cubeta de la panificadora, programa masa con levado.
- Si la hacemos a mano, empezar a trabajar todos los ingredientes en un cuenco grande y cuando ya la tengamos unida, pasamos la masa a la encimera y amasamos un poco para dejarla formando una bola uniforme. Es una masa muy fácil de trabajar, y nada pegajosa.
- Dejamos nuestra bola tapada y descansando, hasta que doble volumen. { una hora ha tardado la mía }
- Extender la masa con ayuda del rodillo, pero dejándola gruesa.
- Colocarla sobre papel de horno, en la bandeja donde la hornearemos.
- Cortar todos los ingredientes en trozos pequeños y la cebolla en aros.
- Disponerlos por encima de la Coca.
- Dejar levar de nuevo hasta que veamos que ha doblado otra vez el volumen. { de nuevo, casi otra hora }
- Encendemos el horno para calentarlo, con quince minutos será suficiente.
- Dejamos la coca dentro una media hora, altura media. Como cada horno es un mundo, la mía a los veinte minutos casi estaba, apagué el horno y la dejé cinco minutos más dentro.
Gracias Alejandra por tu receta, francamente riquísima y vosotros animaros, que se pueden hacer Cocas, combinando los ingredientes que más nos gusten.
