7 de agosto de 2015

Croque - Monsieur Sandwich

       

Hoy traigo otro Sandwich, de los que tengo en mi lista de preferidos.
La primera vez que lo tomé, fue como desayuno tras una larga noche de fiesta. Y me pareció, en ese momento la cosa más rica del mundo.
Evidentemente no es para hacerlo a diario, pero es perfecto si quieres darte un gustazo de vez en cuando. Para un buen desayuno . . . de esos tardíos . . .  de fin de semana . . . o en vacaciones . . . cuando no tienes prisas  . . . repites taza de café mientras lees el periódico . . . y te puedes entretener todo el tiempo del mundo.
Está delicioso y no tardas ni dos minutos en montarlo. Para una cena informal también está genial, lo acompañas de una buena ensalada y sin mucho tiempo en la cocina, todos te harán la ola.
Eso si, cómelo bien caliente, que es como está rico.


Este sandwich goza de fama internacional, pero su cuna es francesa. La primera vez que apareció en la Carta de un Café de París fue en 1.910. Si lo coronas con un huevo frito o a la plancha, pasa a llamarse Croque - Madame, pues recuerda al tocado de las señoras de principios del Siglo XX.
Como todas las preparaciones clásicas, cuenta con innumerables variantes: con mantequilla o sin ella; pan blanco o de semillas; hecho al horno o a la plancha; bañado de bechamel o pasado por huevo batido  . . .
Ésta es la forma que me enseñaron y por mucho que la repito, la encuentro tan rica, que no la cambio.






                                         

- Pon el aceite { o la mantequilla } a calentar, añade la harina y la dejas que se tueste. Como ves yo, prefiero utilizar aceite.
 - Sabrás que está tostada por el olor, verás lo bien que huele.



- Le añades la leche caliente poco a poco y no dejes de mover, sigues añadiendo la leche hasta que veas que tiene la consistencia que quieras. 
- Ten en cuenta que mientras se enfría, va espesando.
- Rectifiamos de sal, y añadimos la nuez moscada. 
- Dejamos enfríar.
                                                                                    

- Pondremos las rebanadas de pan de molde { el MÍO casero} y untamos bien de bechamel.
- Es mejor que esté fría, para que tenga más cuerpo, si consigues una consistencia de queso de untar, para mí esa es la perfecta.

- Repartimos una buena capa de queso rallado sobre la rodaja de pan.
- Turno de la loncha de jamón cocido. Si quieres puedes poner dos, cada  uno a su gusto.
- De nuevo, otra capa de queso rallado.

- Tapamos con la otra rodaja de pan.
- Por la cara externa del pan, untamos generosamente de bechamel.
- Pondremos otra capa de queso rallado.

- Encendemos el horno a 250º, y dejamos el sandwich a media altura durante diez minutos.
- Vigilaremos para ver cuándo está tostado, y listo para servir.
     

Es fácil la receta de hoy ¿verdad?  Espero que te animes, merece la pena.

Eso es todo por hoy, nos vemos en unos días
Espero que seas feliz, o al menos, lo intentes.