Aunque el Verano pasó según el calendario y estuvo rarito por algunas partes de la geografía, aquí seguimos con un tiempo estupendo y muchas ganas de seguir comiendo platos fríos.
Sin duda, las ensaladas son las reinas de las mesas estivales, (aunque las comamos todo el año) y lo bueno que tienen -sin entrar en los beneficios para la salud-, es que admiten tantas combinaciones, que dependiendo de la ocasión o tu estado de ánimo, puedes estar meses sin repetir la misma. Aunque la que traigo hoy, dan ganas de hacerla cada pocos días, está increíble.
Sin duda, las ensaladas son las reinas de las mesas estivales, (aunque las comamos todo el año) y lo bueno que tienen -sin entrar en los beneficios para la salud-, es que admiten tantas combinaciones, que dependiendo de la ocasión o tu estado de ánimo, puedes estar meses sin repetir la misma. Aunque la que traigo hoy, dan ganas de hacerla cada pocos días, está increíble.
En el mes de Agosto, cuando ¡¡ por fin !! empezaron a verse los higos en el mercado, me regalaron una caja de ellos recién cogidos. Qué alegría dan estas cosas ¿verdad? Olían a higuera cuando llegaron a casa. No eran muy grandes, pero si dulces, jugosos y riquísimos. Estaba deseando hacer esta ensalada, que preparó mi amiga Ana en su casa para una comilona a la que asistimos y nos lo pasamos en grande.
Ella la encontró en un libro de recetas que sacó de la Biblioteca y tengo que decir que no pudo elegir mejor, es una delicia de principio a fin. El único cambio que hice fue añadirle almendras crudas con piel en vez de nueces, porque se me habían terminado en ese momento. Por muchas nueces que compre, a los de casa siempre les parecen pocas, y las comen a diario para picotear entre horas, así que cuando quiero echar mano de ellas para cocinar, me encuentro la mayoría de las veces con el bote vacío. Elijas nueces o almendras, las dos son estupendas opciones. Te recomiendo esta ensalada y me encantaría que la hicieras.
No vayas a pensar que porque estoy a dieta me he vuelto monotemática, el único motivo de haber publicado dos ensaladas seguidas, es para que puedas prepararlas. Por suerte o no, los higos tienen una temporada corta . . . y están tan ricossss ¿verdad?
No hay constancia del paso a paso, es tan sencilla que no fue hasta el último momento, cuando ya la tenía montada en el plato que no me decidí a subirla al blog. Tan solo hay que trocear los ingredientes del tamaño que más te guste y colocarlos de forma armónica en la fuente. Aunque te digo las cantidades que utilicé para una persona, aquí el gusto particular es el que decide.
3 Hojas de Lechuga Iceberg cortada en Juliana
3 Lonchas de Jamón Serrano troceadas a mano.
6 Higos en rodajas
6 Higos en rodajas
8 Almendras Crudas o Nueces Peladas
2 Cdas de Aceite de Oliva Virgen Extra
1 Cda de Vinagre de Manzana
Sal marina al gusto
Si aún eres de las que piensas que añadirle fruta a la ensalada es una osadía, te aseguro que el contraste de sabores es asombroso. Ciertamente no todas valen según mi gusto particular, pero la gran mayoría de ellas alegran y enriquecen una barbaridad la ensalada que estás preparando en el momento.
¿Te he convencido?
Esto es todo por hoy.
Nos vemos en unos días.
Hasta entonces, espero que seas feliz.
** Otras recetas con higos publicadas en el blog que te pueden interesar: Mermelada Extra de Higos, Casamientos de Verano y Pastelitos de Higos.