10 de mayo de 2013

Pizza Con Harina Integral y de Garbanzos.



Hace años que en casa no se compran bases de pizza, y lo bueno de hacer tú la masa es que eliges, ese día, cómo la quieres.
Porque no siempre apetece igual.  Antes de darles forma pregunto a cada uno cómo la quieren disfrutar, si gruesa, fina, muy fina o super gruesa. Todos la toman con harina blanca, menos yo, que me gusta más la integral y si encima le añado una pequeña proporción de harina de garbanzos, ya la convierto en mi preferida.
                             

Os dejo por aquí la receta que hago, por si alguno quiere probar nuevos sabores y se atreve con ésta. Desde ya os digo, que para mí de momento es la mejor.
Suelo hacerlas los fines de semana, que es cuando hay más tiempo de enredar en la cocina, y mucho más grande de lo que una persona es capaz de comer de una vez.
Fijaros en el acabado rústico y crujiente del borde, creo que es bastante tentador.
                    

 En lo que sí coinciden todos, es que la quieren grande para que sobre, y así cenar lo que queda, dejarla para cuando se vuelve de fiesta en la madrugada o para el día siguiente. No sé si somos raros, pero se ha convertido en una costumbre familiar.


Por supuesto los ingredientes también varían, aunque están los básicos, que son para todos, y los extras...parezco una pizzería explicando el menú  (risas)

Necesitaremos: (para 3 personas)



                                     Harina integral......250 grs.

                                     Harina de garbanzos......60 grs.

                                     Levadura seca de panadero......7 grs.

                                     Sal......5 grs.

                                     Aceite de oliva......25 grs.

                                     Agua templada........200 grs.

*Necesitaremos más harina para trabajar la masa sobre la encimera.
*La masa lleva poca sal, porque los ingredientes que añadimos ya aportan bastante, y quedaría salada.

Cómo la haremos:


  • Hacemos un volcán con la harina, y añadimos el resto de los ingredientes en el centro.
  • Amasamos bien, hasta que  deje de estar pegajosa, es una masa elástica y se trabaja bien. 
  • Hacemos una bola, enharinamos un recipiente amplio y dejamos la bola descansar hasta que doble su volumen. 
  • Si contamos con panificadora, pondremos todos los ingredientes en el programa de masas que dura 15 minutos y dejamos levar dentro de la cubeta.
  • Sacamos la masa, enharinamos ligeramente la encimera, desgasificamos la masa y la trabajamos un poco. Dos o tres minutos bastará.
  • Volvemos a forma una bola y empezamos a extender con el rodillo. Aunque siempre termino extendiendo con los dedos, de ahí las marcas sobre la masa de la pizza.
  • Dejamos la masa aproximadamente con  1/2 centímetro de grosor.

  •  Preparamos la bandeja del horno forrada con papel de horno.
  •  Colocamos la masa encima, le damos la forma que queramos, redonda o cuadrada.
  •  Lista para poner los ingredientes que más nos gusten sobre ella.
 Y ya puestos, os digo también los ingredientes que le añadí, por orden : un poco de tomate triturado con orégano, queso rallado, calabacín en rodajas, tomate sin piel en rodajas, champiñones laminados, aceitunas negras en rodajas, atún bien escurrido y tropezones de beicon.


  • Precalentamos el horno al máximo durante quince minutos, y cuando dejemos la pizza dentro, bajamos a 200º, altura media alta durante 20 minutos.
  • Pasado este tiempo, la dejamos en la parte más baja del horno durante 8-10 minutos y lista.
El fondo estará crujiente, los bordes también y será una delicia, cada vez que le demos un bocado.

Estaba para rechupetearse hasta los codos, espero que la hagáis y que os guste tanto como a mí.