Aunque la receta de Mara me gustó muchísimo, pasaros por su blog y ya veréis que tiene cosas ricas y golosas, esa vena cocinera que todos llevamos y nos impide casi siempre copiar una receta al pie de la letra y sin cambiar ni una coma, me llevó a hacer unos cambios significativos: eliminar el azúcar y cambiarlo por estevia; y utilizar zumo de naranja en vez de pacharán.
La estevia la he infusionado con la leche y ha quedado un bizcocho bien dulce, y el pacharán lo he sustituido por zumo de naranja, que le ha quedado genial, proporcionándole un sabor a cítrico bastante agradable.
Ha sido el complemento perfecto para una infusión de frutas, en una tranquila tarde, viendo como va despidiéndose la luz del día, para mi gusto, demasiado temprano aún, claro, que estamos en invierno y es lo normal.
Vamos al lío.
Necesitarémos:
- 3 huevos.
- 300 grs. de harina integral.
- 15 grs de estevia en hojas.
- 275 mls. de leche, sólo utilizaremos 200.
- 1 cta. de moka de agua de azahar.
- 60 mls. de aceite de girasol.
- 1 sobre de levadura para repostería.
- Zumo de 1 naranja.
- 50 grs. de higos secos.
- Pondremos la leche a calentar y cuando esté a punto de hervir, le añadimos la estevia en hojas y dejamos que infusione hasta que haya templado la leche.
- Cortamos los higos en tiras, mejor hacerlo con unas tijeras, y exprimimos el zumo de una naranja, dejamos sumergido los higos durante una media hora más o menos, se lo beberán entero.La próxima vez cortaré los higos en cuartos, para notar mejor su presencia.
- Cernimos la harina con la levadura y reservamos.
- Batimos las yemas de los huevos, las claras las batimos a punto de nieve y las unimos con movimientos envolventes.
- Encendemos el horno a 180º.
- Colamos la leche, tenemos que conseguir 200 mls, hemos puesto leche de más, porque la estevia al infusionar absorbe leche,tendremos que presionarla un poco para conseguir la cantidad deseada. La añadimos a los huevos,
- Incorporamos la harina poco a poco, con movimientos suaves, para que no pierda volumen, al ser una harina integral y más pesada que la de repostería, queremos que nos quede un bizcocho esponjoso.
- Llega el momento de añadirle los higos y el agua de azahar.
- Distribuimos la masa en el molde elegido, los míos son de tamaño mini de silicona y me ha alcanzado para hacer cinco, en quince minutos los tenía listos. Pero evidentemente si se elige un único molde, al ser más cantidad, habrá que incrementar el tiempo, una media hora como mínimo y a partir de ahí vigilad y haced la prueba de la aguja, en cuanto salga limpia, listo para sacarlo del horno.
- Una vez cocido, los dejamos cinco minutos para desmoldarlos mejor, los sacamos y terminamos de enfriarlos sobre una rejilla.
Listos para tomarlos sólos o acompañados, quedan muy jugosos, húmedos, dulces y extraordinarios, animaros a hacerlos, os van a sorprender.
