9 de noviembre de 2015

Brownie con Nueces

 

                                    Hoy es Lunes, un día perfecto para endulzarnos la vida.

          A estas alturas estoy segura que todo el mundo ha comido alguna vez un Brownie. Nombre dado por el color que lo caracteríza, es un postre típico de la cocina de Estados Unidos, y bastante popular desde hace años. Como a otras grandes recetas, se le atribuye la creación a un error u olvido donde no se añadió la levadura. 

         Pero otra versión, bien diferente por cierto, señala a la Señora Fanny Farner como la verdadera creadora de esta chocolatosa delicia. Ella, que hacía galletas a tutiplén y contaba con experiencia para acomodar ingredientes, ideó ajustar la receta de sus galletas de chocolate,  pero horneando la masa  sin tanta harina y en un molde rectangular. Esto ocurrió allá por el año 1905. De hecho en casa cuando hago las galletas Blanco y Negro, todos coinciden en que saben a Brownie.

         ¿La textura es más densa que la de un bizcocho por no llevar levadura? Es más quebradiza quizás, pero diferente en cualquier caso. Existen multitud de variantes, y uno de los más clásicos es éste de nueces. Si te digo la verdad, también mi preferido.

             En casa en cambio, se pirran por el que incluye Galletas Oreo. Lo he repetido tantas veces que podría hacerlo con los ojos cerrados. Mi hija, sin ir más lejos, cada vez que tiene reunión con los amigos, tiene que llevarlo. Y hay una Ley no escrita: tengo que hacer otro para el resto de la familia, pues menudos son para que salga un Brownie por la puerta, sin que ellos lo hayan catado.
    


          La forma característica de este pastel es cuadrado, lo puedes hornear en un molde así o rectangular, y después cortarlo en trozos. Pensé al principio hacer porciones más pequeñas, la verdad, pero se me fue la mano, y terminaron siendo tamaño XXL.

        Más fácil de hacer, imposible. No tienes excusa para prepararlo
¿a que ya no hace calor para encender el horno?
Pues ale . . . ale, animate, que ya lo creo que merece la pena.
Y encima con Helado Casero, un despiporre en toda regla. 
                                              

                        
                                             
   


    Con estas cantidades te podrían salir ocho trozos pequeños o cuatro bien grandotes como los de la imagen. Si quieres que te sobre, dobla los ingredientes por dos.
Si utilizas azúcar blanca, es la misma cantidad.
                                                           
             
     

- Trocea las nueces, me gusta hacerlo con el cuchillo para no dejarlas molidas.


- La mantequilla y el chocolate, derrítelos. Lo puedes hacer al baño maría o en el micro en cortos intervalos, con cuidado de no quemarlo.


- Separa las yemas de las claras. Mejor que estén a temperatura ambiente.
- Las yemas las bates con el Azúcar de Abedul.


 - Tienes que batir hasta que las yemas blanqueen.
 - Añade ahora el chocolate derretido y mezcla con movimientos envolventes.


- Incorpora la harina y también la Sal Marina.


 - Mezcla bien y después, añade las nueces.


- Bate las claras hasta que estén montadas y bien firmes.


 - Incorpora la mezcla del chocolate a las claras, poco a poco, para no perder volumen.


- Moja un trozo de papel de cocina y forra facilmente el molde donde vas a hornearlo. El molde era de 15 x 15.


 - Vierte la mezcla en el molde. Horno precalentado a 170º entre 30-40 minutos. Altura media.
 - Como no hay ningún horno igual, tendrás que comprobar. Pincha con un palillo y aunque salga un poco manchado, sácalo. Terminará de hacerse con el calor del propio brownie. El mío necesitó 40 minutos.
 - Hay que dejarlo enfriar sobre una rejilla. Pero no intentes quitar el papel hasta que esté templado, se te puede romper. Para cortarlo, espera siempre a que esté frío.


 Listo para servir.
 Para presentarlo, derretí los trocitos de chocolate e hice unos hilos por encima del brownie {reconozco que mi vena artística no es muy allá, pero es lo que hay}. Lo acompañé de Helado de Plátano Casero {pero sin añadirle el cacao}. Ya sé que lo habitual es comerlo con helado de vainilla. Pero la combinación de Chocolate-Plátano es de mis preferidas. 
Si el brownie está templado, te aseguro que el éxito es total. Y si lo haces el día de antes y eres capaz de guardarlo, ahí ya si que te hago la ola, y te digo Ole Ole y Ole !!!
              

Eso es todo por hoy, nos vemos en unos días.
Hasta entonces, se feliz o al menos, inténtalo.

Disfruto entrando en su cocina.  Tiene recetas bien ricas, muy variadas y mejor explicadas. 
Es de esas personas que contagian alegría y eso yo, siempre lo agradezco ¿tú no?. 
Maribel: Al pie de la letra no está la receta, pero el paso a paso, copiadito a pie juntillas.
Gracias por compartirla, creo que de momento es el Brownie definitivo.
¡¡¡ Nos ha encantado !!!